Erronkariko hillerrian
dagoen eskulturak azkenean lehenengo saria irabazi du. Mila esker denoi.
Esta magnífica escultura, obra de Mariano Benlliure, se colocó en
el cementerio de Roncal en 1901 encima de la cripta subterránea en la que
descansan los restos de uno de los mejores tenores que ha habido en el mundo de
la opera: El tenor navarro JULIAN GAYARRE.
Este monumento funerario se levanta sobre una escalinata de cuatro
gradas, en la que se apoya un sarcófago de mármol blanco decorado con ángeles y
y niños cantores que interpretan libretos de óperas.
En un lateral del sarcófago se recuesta una figura femenina de
bronce, clara alegoría de la Música que oculta su rostro y llora la muerte de
un tenor sobre una lira rota.
Apoyados en el sarcófago, dos ángeles de bronce, símbolos
de la Armonía y de la Melodía, elevan al cielo un féretro cubierto con palmas y
coronas.
Encima del féretro otro ángel, con sus alas desplegadas, se inclina
queriendo escuchar la voz enmudecida del tenor.
Es este mausoleo un conjunto escultórico lleno de alegoría que
quiere recatar la última nota que sale del féretro, como un eco. Mientras la
Armonía y la Melodía elevan al Cielo el
don divino de su voz, en la tierra queda la materia, la parte mortal
representada por la Música que llora sobre una lira rota
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